Odian ver la decadencia invernal
en sus árboles, jolgorios y atuendos primaverales.
Eran sus voces a punta de revolcones
Eran sus voces a punta de revolcones
en el fango de la pradera,
las que odiando, oían después de amar.
Las gotas de lluvia embellecen a la rosa
tras el cristal de hombres y mujeres desahuciados,
casi muertos por la estocada aciaga de la vejez.
Ya no son suficientes las páginas ilustradas.
Tienen que rasgarlas para no ver el tinte descarnado de un paisaje ensangrentado.
6 comentarios:
que taciturno poema
pero aun asi hay esa musica que tienes...
besos Nicole
que bacán volver a leerte. echaba muchísimo de menos estas líneas.
muchas gracias por regresar ;)
la palabra del poeta embellece la vida de quien la siente al leerla o escucharla
así sea
un beso
ya no son suficientes las páginas ilustradas... Nunca lo fueron. eso me hiciste pensar.
Como siempre, pequeñas grandes líneas...
Cuidate mucho y nos estamos leyendo ;)
ah... y seguiré pasando a solazarme, así que trate de actualizar, ya?
besos ;)
hace mucho que no te visitaba...
que bueno volver a leerte!
SAlu2
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